Reciban un abrazo cariñoso y agradecido de saludo y compromiso fraterno. Estamos comenzando a recorrer el año 32 de trabajo de formación y acompañamiento de nuestros niños y niñas; han sido años trabajosos para una organización comunitaria de base. Sostener la magnitud de esta obra que implica educación y desarrollo humano de los más pequeñxs de nuestro pueblo. Sí trabajosos, pero colmado de satisfacción, de logros, de verlos florecer cada día en su crecimiento personal y colectivo, como actores protagónicos de su vida y sus proyectos, que nos indican sin lugar a duda que Casa Azul sigue siendo una experiencia educativa innovadora, de propiedad comunitaria, aun necesaria y de presencia urgente de misión directa con nuestra niñez y como aporte referente para las transformaciones que en el campo educacional deben producirse.

Hemos contado siempre con un equipo de trabajo comprometido con el alma en esta tarea de tantos años, pero además con una comunidad territorial siempre atenta y caminando junto a la Escuela. También con el compromiso permanente de amigos que han solidarizado y compartido para que esta tarea educativa pueda mantener los desafíos que implica nuestra concepción del aprendizaje y el desarrollo humano.

No somos producto de la creación de unos pocos lúcidos y bondadosos, hemos sido hasta ahora creación colectiva comunitaria, con la participación de muchos seres humanos que han compartido con generosidad cotidiana lo propio.

Hoy estamos enfrentando nuevamente dificultades para mantener sin alterar (recortar) el diseño de nuestro trabajo; ya nos está afectando el gasto que implica protegerse de la pandemia y sabemos que mantener el andamiaje de nuestro trabajo educativo siempre ha sido de mayor costo.

No queremos alterar nuestros horarios, tampoco disminuir en el currículo la dimensión ligada al arte y la cultura, y menos aún el abordaje especializado de las particularidades que presentan nuestras niñas y niños. Requerimos con urgencia apoyo, ayuda para mantener la integralidad educativa de la vida de la escuela Casa Azul.

Necesitamos de todos y todas, de cada uno de ustedes, para continuar sosteniendo esta casa donde todos y todas tienen cabida.
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Carlos Mellado
ONG Casa Azul